Departamento de Trabajo Social aborda los crecientes desafíos de las familias latinoamericanas en la actualidad
El ciclo de conferencia “Familia, conflicto y responsabilidad parental” se realiza en el marco del VII Seminario Internacional sobre Familia y contó con la ponencia de la Dra. Ángela Jaramillo Suarez de la Pontificia Universidad Javeriana (PUJ) y la Dra. Cecilia Mayorga Muñoz de la Universidad de La Frontera
La familia latinoamericana como institución en el proceso de construcción social enfrenta crecientes desafíos, por ello el Departamento de Trabajo Social de la Universidad de La Frontera ha decidido tratarlo de manera técnica y científica. Es en este contexto que con el apoyo de la Pontificia Universidad Javeriana de Colombia se encuentra organizando el VII Seminario Internacional sobre Familia, a desarrollarse en noviembre de 2021.
La actividad virtual, es la tercera instancia de encuentro que se realiza de manera previa a la realización del VII Seminario Internacional sobre Familia y fue desarrollada mediante la plataforma ZOOM, en donde el académico del Depto. de Trabajo Socia, Abel Soto Higuera, fue el encargado de dar las palabras de bienvenida, cumpliendo también el rol de moderador en la instancia que estuvo dividida en dos conferencias.
Educando la mente y el corazón: Promoción de aprendizaje socioemocional en niños y niñas
La primera parte del evento fue dictada por la psicóloga de la PUJ, Dra. Angela María Jaramillo Suarez, quien participó y trabajó 10 años junto a su mentora en Vancouver (Canadá) como implementadora del Programa “Roots of Empathy” que comienza con el cuestionarse ¿será que un bebé es un catalizador de cambio?
La Mg. en psicología educativa con énfasis en desarrollo humano, aprendizaje y cultura, tiene 15 años de experiencia en el laboratorio de aprendizaje socioemocional en University of British Columbia en Vancouver con énfasis en planeación, preparación y ejecución de propuestas de investigación relacionadas con el desarrollo de la primera infancia y el desarrollo emocional, formando parte de un equipo interdisciplinario.
“Ahora sabemos que el estrés es contagioso, así como el «fumador pasivo» también es complicado, existen estudios de empatía en donde se ha visto que ésta a disminuido a partir del año 2000 en adelante, en donde se ve la correlación que podría existir entre la disminución de empatía y la aparición en masa del Internet. Otras investigaciones muestran como sentimientos negativos, preocupación y tristeza han ido aumentando a lo largo de los años”, explica la doctoranda en Psicología de la PUJ, Angela Jaramillo explica
Abarcando los problemas de salud mental, estudios de la OMS a partir de 2017 muestran como la depresión y ansiedad están presentes en todas las regiones del globo y como estas son un factor que puede desencadenar conductas de riesgo, suicidio, entre otros. Frente a esto la pregunta del equipo de investigación; ¿hacia dónde vamos?, la respuesta siempre apunta a la prevención.
Por ello, el programa se enfoca en el aprendizaje socioemocional, un proceso mediante el cual niños, niñas y adultos pueden adquirir y aplicar conocimiento, habilidades y aptitudes para lograr desarrollar identidades saludables, manejar emociones, sentir y mostrar empatía, lograr metas personales y colectivas, establecer relaciones interpersonales y tomar decisiones responsables y afectuosas.
Proceso de separación y/o divorcio y la reorganización de la vida familiar
Esta temática fue abordada por la Dra. En Ciencias Humanas y Sociales, Cecilia Mayorga Muñoz, quien partió contextualizando cómo el término de familia a significado numerosas y significativas transformaciones en las últimas décadas, y se han visibilizado las transformaciones o modificaciones de las estructuras familiares que tradicionalmente se conocían.
Hoy existe diversidad de organizaciones familiares y no solamente ha cambiado la estructura de esta, sino que también las funciones que cumple la familia y también cómo resuelven los conflictos, a través del divorcio, que hoy está mucho más aceptado socialmente, lo que ha hecho que las tasas de este a nivel mundial hayan incrementado significativamente.
La Dra. Mayorga explica el divorcio como un proceso demográfico y sociológico, que se caracteriza por ser sistémico y generar cambios afectivos, económicos, sociales y legales que repercuten en todos los miembros de la familia en dimensiones distintas. “Este proceso se caracteriza fundamentalmente por el cese de la vida en común, la reorganización de las funciones domésticas y la transformación de las relaciones familiares, desde el punto de vista psicosocial, donde es importante tener en cuenta los conceptos de separación y el divorcio”.
Dentro de las transformaciones familiares se puede considerar que un cambio sustantivo, es que la familia ya no se constituye a partir del matrimonio, sino a través de uniones consensuadas, y desde esa perspectiva el cese de la vida en común (sea que la pareja haya estado casada o no) desde el punto de vista psicosocial los efectos son los mismos, ya que el divorcio es un concepto que esta relacionado con la anulación jurídica del vínculo del matrimonio, pero en términos emocionales, psicológicos y económicos, los efectos son exactamente lo mismo.
La Dra. Cecilia Mayorga, quien también se desempeña como Coordinadora de la línea de estudios de familia del Núcleo Científico y Tecnológico de Ufro, asegura: “según datos 2019, en Chile 1 de cada 5 matrimonios dura menos de 10 años”. Y una vez que se produce el divorcio, surge la estructura familiar monoparental, que generalmente se traduce en familias con jefatura femenina, es decir, que es la mujer quien se queda al cuidado de los hijos menores de edad.
Esta reestructuración familiar de jefatura femenina genera efectos económicos como la vulnerabilidad, no porque la estructura así lo predisponga, sino que, asociada a esta configuración, aparecen factores de contexto (en Chile el sueldo de los hombres sufre una variación promedio de 4%, mientras que el de mujeres alcanza el 39%).
El divorcio es un proceso que genera estrés tanto entre adultos, adultos con los hijos/as y otros familiares, porque tiene una dimensión económica, psicológica y social que no es fácil de resolver en un corto plazo. Asociado al estrés familiar también encontramos una reorganización de sentimientos y emociones y cambio en las redes de apoyo social.
En síntesis, el divorcio o separación no es un proceso que se presente en las familias de manera abrupta, sino que es un proceso de cuatro etapas: la decisión de divorciarse, el planteamiento de la ruptura, la separación propiamente tal y finalmente la superación del duelo de la ruptura que llega a consolidar la vida independiente y a establecer nuevas relaciones como la coparentalidad, de pareja y sociales.
A modo de cierre, se recordó que la próxima convocatoria de conferencias se realizará en diciembre y se dio paso a un espacio de preguntas relacionadas a las temáticas de ambas presentaciones en donde los asistentes pudieron resolver dudas centradas a los tiempos actuales y las realidades de diferentes naciones, ya que entre los cerca de 130 asistentes participaron personas de Chile, Ecuador y Colombia.
Natalia Rodríguez Solís
Facultad de Educación, Cs. Sociales y Humanidades